La España Verde busca su hueco en el sueño americano. La sesión de trabajo organizada por Turespaña con las
—¿ A que mercado se dedica Central Holidays?
–Son agencias que venden cultura. Tenemos un departamento de grupos, uno de incentivos y un volumen alto de individuales. Vendemos recogidos con guía, sin guía, con coche, sin coche y vendemos a las agencias de viaje como mayorista y también directamente al cliente.
—¿Qué fue lo que os atrajo de la marca “España Verde”?
–La verdad es que lo primero que nos llamó la atención es el paisaje: es completamente distinto a lo que te puedes encontrar en otras partes de España. Lo segundo, la oferta cultural. Lo tercero, la gastronomía: es muy buena y está muy bien desarrollada, pero apenas es conocida por el americano. Entonces estamos viendo poco a poco que crece lo que aquí se llama el “Guggenheim effect”: crece el mercado y el cliente es más sofisticado. Está pidiendo algo más interesante. Cogemos ventaja por el año Xacobeo, pero es un solo año y vienen millones. Ahora tenemos un programa y queremos ampliar y abrir el mercado para enfocarlo a esta zona.
—¿La marca “España verde” es conocida en los Estados Unidos o aún queda todo por hacer?
–Depende donde vayas. En la ciudades de las dos costas sí, en Nueva York, Filadelfia o Los Ángeles. Incluso en Florida, por el tema del idioma, es conocido. Pero en el interior es muy poco conocido. La ventaja que tenemos, y esto lo comentábamos ayer, es que desde hace dos años que a los estadounidenses se les exige un pasaporte incluso para ir al Caribe. Ahora son millones de pasajeros documentados que se animan a viajar ya que tiene un documento. Esto es bueno porque en España ya se dan cuenta que entran más clientes y eso abre el mercado.
—¿El turista de Estados Unidos varía de ciudades o es fiel a un solo destino?
–Le gusta conocer. Además, lo bueno que tiene España es que gusta a los clientes. Vienen hasta tres veces sin repetir. No es como en Egipto, que es un buen destino pero no se suele repetir. Por ejemplo, cuando estuvimos en Bilbao encontramos de casualidad a una pareja de Filadelfia. Era su primera vez en España y estaban aquí para ver el Guggenheim y ya entonces sabían que querían regresar. Es muy típico de los turistas de Estado Unidos.
—Habéis estado reunidos toda la mañana con destinos muy interesantes de todo el norte de España ¿Has visto algo que te haya llamado la atención en especial?
–Hay interés por abrir el mercado y traer a más gente de Estado Unidos. Nos ha gustado que hayan creado la marca de Green Spain, porque los turistas americanos no van a venir para ver una sola ciudad. Es demasiada distancia entre origen y destino para venir a un solo lugar. Entonces esta marca nos ayuda un montón a vender el destino. Creas una imagen de Green Spain. He visto que los hoteles y las ciudades están bien preparados y entienden bien qué necesitan para atraer a los visitantes americanos.
—¿Qué activos crees que pueden hacer crecer la marca “España Verde” en EE.UU?
–Bueno, para nuestra empresa creemos que la principal marca es Paradores, es una marca conocida y con prestigio. Después la gastronomía y en tercer lugar la cultura y la historia. Todo esto en una zona que es…preciosa.
—¿Cómo es el típico turista americano en el norte de España?
–Nuestro cliente es un cliente con estudios, entre 35 a 60 años, tiene 1.2 hijos (risas) y que ha viajado a Europa por lo menos dos veces.
—No es ningún novato, entonces…
–Sí, eso nos da mucho trabajo. No es una persona a la que le puedas vender cualquier cosa.