La Diputación de Lugo ha sacado a la venta los terrenos sobre los que se asienta el Hotel Miño, por un precio de 753.000 euros, además de las reparaciones que el nuevo propietario tenga que realizar de acuerdo con la nueva función que tenga el edificio. El inmueble está situado en la avenida de Madrid en las inmediaciones de la nacional sexta y es propiedad de la diputación desde 1984, cuando el gobierno provincial de la época lo adquirió a Manuel González Rodríguez, por aquel entonces diputado del antiguo Partido Demócrata Popular.
La compra se hizo para que el hotel sirviese como residencia de ancianos, aunque no estuvo exenta de polémica: el presidente de la diputación lucense en 1984, Francisco Cacharro Pardo, siguió adelante con la compra a pesar de estar en contra el informe del arquitecto de la diputación.
El proyecto de la residencia cayó en el olvido ya que contaba con varios factores desfavorables: la zona no estaba bien comunicada, y al lado del hotel había una gasolinera y muy cerca, el río Miño, lo que provocaba humedades.
En la primavera de 2007 la diputación acordó su salida a la venta y en agosto llegó a un principio de acuerdo con la empresa a la empresa Maexpa, por 962.000 euros. Sin embargo, la operación no llegó a formalizarse, según la Diputación por incumplimiento del comprador.
El actual equipo de gobierno quiere que se le dé un nuevo uso a las instalaciones y que sirva para rehabilitar un edificio de 2.793 metros cuadrados que acusa el abandono.