Compostela tiene un nuevo sonido que rebota en el empedrado de la Praza do Obradoiro. La carraca de la catedral, después de pasar más de 40 años en el olvido, regresó con su soniquete de guijarros triturados. De todas formas, no es el mismo instrumento de casi un siglo de antigüedad, que se utilizaba para acallar el estruendo de las campanas durante la época de recogimiento que se vivía en Semana Santa.
El Consorcio de Santiago, con la colaboración de la S.A. de Xestión del Xacobeo, apoyó la restitución de la carraca, colocando una réplica de la anterior que se hizo oír esta mañana de modo simbólico, pero que se inaugurará oficialmente dentro de dos semanas, cuando llegue la Páscua.
El proyecto, en el que se invirtieron 25.000 euros, contó con el apoyo de la jerarquía eclesiástica, y rescató del olvido un instrumento emblemático, que ya forma parte de lo que el alcalde de Compostela, Xosé Antonio Sánchez Bugallo, denominó como “la inmensidad del patrimonio de esta ciudad”.
La réplica, construida también en madera de castaño, imita todas las características de la carraca primitiva, y fue elaborada a partir de un proyecto de la Oficina Técnica-Taller de Proxectos do Consorcio. El mecanismo sonoro del instrumento está compuesto por cuatro cajas –de unos dos metros y medio– dispuestas en forma de cruz, con una lengüeta en cada una de ellas y que al girar golpean un eje en forma de rueda dentada, que las hace sonar a la vez. Todo el aparato queda anclado a una de las paredes interiores de la torre en la que está situada.
Sánchez Bugallo afirmó del instrumento que “é un elemento que forma parte da nosa historia e cultura”, y que además es una pieza del “insondable pozo de riqueza” que contiene la catedral. Así mismo, el deán de este templo religioso compostelano, Xosé María Díaz, reconoció que en un principio la idea de la restauración no le entusiasmó demasiado, y que incluso “nos esqueceramos da existencia da carraca”, pero consideró la acción de forma positiva tras ver “a expectación xerada”.
Semana Santa
La réplica instalada en la torre no se desmantelará, ni es un proyecto exclusivo para el Xacobeo. El deán indicó que se cuidará y mantendrá “para que a toquen todos os anos”. De forma oficial sonará en el transcurso de esta Samana Santa, comenzando por las 12 horas del viernes 2 de abril y terminando a las diez de la noche del sábado 3.
Las carracas, actualmente muy en desuso en la liturgia, se hacen sonar durante estas fechas señaladas como símbolo de duelo por la muerte de Cristo. Se considera que las campanas son su representación, por lo que el sonido agudo de éstas, se cambia durante unos días, por el estruendo de la carraca.