La casa por la ventana. Los famosos “fuegos del Apóstol” que se lanzan durante la noche del 24 de julio, acompañados por un espectáculo audiovisual en la Praza do Obradoiro durarán este año una semana. Los fastos pirotécnicos no saldrán baratos: 360.000 euros, un 46,9% más que los hasta ahora más caros de la historia, los del 2008, y un 57,2% a mayores de los 229.000 que le habían costado los del 2009, según un dato recogido por La Voz de Galicia.
Hasta ahora, el espectáculo de pólvora y luz tenía dos fechas, la noche del 24 de julio, día grande de las fiestas, y el 31 de julio, con el que se dan por concluidos los festejos. La empresa que gané el concurso de selección –abierto esta semana—deberá preparar réplicas para todas las noches desde el 25 de julio hasta el día 30. Cada noche el espectáculo debe durar media hora como mínimo.
La organización prevé cuantiosas multasen caso de que el espectáculo falle, como sucedió en 2009, y numerosas medidas de seguridad para preservar la integridad de la Catedral.
El espectáculo de pirotecnia del Apóstol durará una semana para celebrar el Año Santo
La casa por la ventana. Los famosos “fuegos del Apóstol” que se lanzan durante la noche del 24 de julio, acompañados por un espectáculo audiovisual en la praza do Obradoiro durarán este año una semana. Los fastos pirotécnicos no saldrán baratos: 360.000 euros, un 46,9% más que los hasta ahora más caros de la historia, los del 2008, y un 57,2% a mayores de los 229.000 que le habían costado los del 2009, según un dato recogido por La Voz de Galicia.
Hasta ahora, el espectáculo de pólvora y luz tenía dos fechas, la noche del 24 de julio, día grande de las fiestas, y el 31 de julio, con el que se dan por concluidos los festejos. La empresa que gané el concurso de selección –abierto esta semana—deberá preparar réplicas para todas las noches desde el 25 de julio hasta el día 30. Cada noche el espectáculo debe durar media hora como mínimo.
La organización prevé cuantiosas multasen caso de que el espectáculo falle, como sucedió en 2009, y numerosas medidas de seguridad para preservar la integridad de la Catedral.