La crisis obligó a cancelar más de 100.00 vuelos y dejó en tierra a más de 10 millones de pasajeros, según los datos de Bruselas.
Kallas anunció también que el ejecutivo comunitario autorizará la concesión de subvenciones a las compañías aérereas. Estas ayudas serán distribuidas por los estados miembros de la Unión. Este dinero permitirá a las aerolíneas aplazar el pago de las tasas de control aéreo y eliminará temporalmente algunas restricciones de tráfico, como las que impiden los vuelos nocturnos, para aliviar la presión inmediata que sufren las aerolíneas debido a la crisis.
Estas medidas, junto con solicitud de Bruselas de acelerar la creación del cielo único europeo, serán examinadas por los ministros de Transportes de la Unión Europea en la reunión extraordinaria convocada por la presidencia española para el próximo 4 de mayo.
Kallas insitió en que las ayudas que se concederán a las compañías aéreas no pueden, en ningún caso, utilizarse para paliar problemas diferentes a los ocasionados por la nube de cenizas. También señaló que si los estados quieren conceder estas ayudas deben ceñirse a los criterios que establezca la comisión: “las ayudas públicas no son un milagro. No hay un fondo disponible que esté esperando para una crisis de este tipo”, señaló el responsable de Transporte.
En los próximos Bruselas presentará directrices comunes sobre cómo deben otorgarse estas ayudas. Las ayudas no podrán utilizarse para que las compañías obtengan ventajas sobre sus competidoras europeas.
Adicionalmente, la CE se propone crear un grupo de expertos que desarrollará una nueva metodología para evaluar los riesgos provocados por las nubes de ceniza volcánica. El objetivo es que la UE proponga una nueva normativa en la reunión de la Organización Internacional de Aviación Civil que se celebrará en septiembre de 2010.
Otras medidas
A medio plazo, el comisario de Transportes ha vuelto a exhortar a los 27 gobiernos a acelerar la creación de un cielo único europeo, bloqueado desde que Bruselas presentó sus propuestas en 2008.
Adicionalmente, será creada una plataforma de la aviación que reunirá a todos los actores implicados a nivel europeo para garantizar una mayor coordinación y pedirá a los Veintisiete un mandato para examinar cómo se puede responder en el futuro a crisis paneuropeas en materia de transporte, especialmente en relación con transportes alternativos.