La vida de un artista debe de ser diferente, es decir, las cosas le vienen de forma inesperada o con sorpresas, y un buen artista se deja llevar al azar.
Tadafumi Kobachi es un escultor japonés y reside en una aldea que está a dos horas en coche desde Tokyo. Su mujer Kaori es una pintora. Tienen una hija de siete años que se llama Tsukiyo. (Su nombre significa “Noche de la Luna”) A su hija también le gusta mucho pintar.
Tadafumi habló hace unos años con otro escultor japonés conocido, Munehiro Ikeda, para informarse de las obras artísticas y históricas que hay en Galicia, y sobre todo, las que hay en el Camino de Santiago. Porque Munehiro Ikeda estuvo en España hace más de diez años con una beca del gobierno japonés para estudiar las obras románicas, y hizo el Camino de Santiago para estudiar las obras artísticas jacobeas. En el Camino, Munehiro iba dibujando lo que veía, los edificios religiosos, las esculturas románicas, y cuando terminó de hacerlo, entregó el libro hecho a mano con sus dibujos a la Xunta de Galicia. Tiene unas 400 páginas y ahora está expuesto en el Museo das Peregrinacións de Santiago al lado de una copia del “Códice Calixtino”.
Pues, Munehiro Ikeda habló a Tadafumi de un monasterio entre muchos que hay en el Camino con mucho cariño y mucho respeto. Era el Monasterio de Samos. Munehiro estuvo en ese monasterio varias veces, y mantiene una estrecha amistad con los monjes. Le explicó a Tadafumi cómo es el monasterio con detalles históricos, religiosos y artísticos.
Desde entonces, Tadafumi emepezó a pensar en ir a Samos para estudiar las obras de este monasterio, y a la vez, para desarrollar su mundo artístico. Esta beca que concede el gobierno japonés y que obtuvo Munehiro Ikeda se puede solicitar hasta la edad de 50 y a Tadafumi le quedan dos años para solicitarla. No hay mucho tiempo para preparar todo. De repente, decidió visitar Galicia este mes con su familia y conocer Galicia, Santiago y este monasterio ya que había un puente en Japón. Después de visitar Santiago unos días, tenía pensado de ir a Samos y hablar con el prior para pedirle un permiso de su estancia en este pueblo espritual para poder estudiar las obras del monasterio si consigue la beca para el proximo año.
Fue a Samos con su mujer y su hija la semana pasada. El dijo que estaba impresionado ante un monasterio tan majestuoso y tan severo por fuera, pero por dentro, tan humano lleno de obras maravillosas de todos los estilos. Habló con el Prior D. José Luis Vélez, y el prior le dijo que no había ningún problema de su estancia en Samos para el próximo año. El prior le enseñó a Tadafumi y a su familia el monasterio y le explicó su historia. El escultor japonés emocionado le dijo al prior que volvería a Samos, entonces, el próximo año con la beca.
Despué de esta visita al monasterio lucense, fue hasta O Cebreiro para conocer el punto de partida del Camino en Galicia. Se quedó mucho tiempo mirando el paisaje gallego de atardecer con el cielo nublado. Pero de vez en cuando salió el sol y iluminó la tierra prometida del santiago apóstol. Tadafumi no hablaba, sólo lo contemplaba.
Ahora el escultor japonés y su familia están en el camino para volver a Japón. Se marchó de Galicia muy feliz porque sabe que podrá volver el próximo año. Otro japonés más que se enamoró de Galicia.
Por Megumi Shiozawa