La Fiscalía Superior de Galicia cree que existe un tráfico comercial ilícito consolidado de objetos religiosos en la comunidad, algo que se venía sospechando desde hace años. Así lo ha aseverado hoy el fiscal superior, Carlos Varela, en su intervención en las VI Xornadas sobre Patrimonio Cultural de Galicia, celebradas en Baiona (Pontevedra).
En este sentido, Varela citó los innumerables delitos contra el patrimonio cultural que poseen los montes vecinales en mano común, como petos de ánimas, cruceros, puentes, yacimientos arqueológicos, restos de calzadas romanas, castros, ermitas, castillos o dólmenes; así como los objetos de arte sacro custodiados en iglesias y pazos.
El responsable de la Fiscalía mostró también su preocupación por la relación entre la legislación sobre patrimonio y las leyes urbanísticas, como las del suelo o las planificaciones municipales; y por los daños que está sufriendo buena parte de la arquitectura defensiva medieval gallega, principalmente en manos privadas.
Procedimientos en 2009
Durante 2009, se registraron en Galicia 20 procedimientos penales por delito contra el patrimonio histórico, 8 en la provincia de A Coruña, otros tantos en la de Pontevedra y 4 en Lugo. 11 de ellas dieron lugar a escritos de acusación de la Fiscalía.
Estos datos suponen una ligera disminución sobre los procedimientos penales incoados en 2008, 25 en toda Galicia, 13 de ellos en la provincia de A Coruña y 12 en Pontevedra. En ese año, fueron 3 las cualificaciones fiscales y se dictaran 8 sentencias, 5 en A Coruña y tres en Pontevedra.
Por otro lado, el pasado año hubo dos sentencias ejemplarizantes en esta materia. En la primera, se condenó a tres submarinistas británicos por extraer materiales de un pecio del siglo XIX en la costa de Ribeira. La otra sentencia firme condenó al administrador de una empresa de losa a un año y tres meses de prisión y una multa de 4.200 euros por causar daños irreversibles en el recinto castrexo de Pena do Castro, en el municipio lucense de A Fonsagrada, tras hacer caso omiso de una orden de paralización de la actividad por parte de la Administración.
Robo del patrimonio eclesiástico
Según los datos manejados por la Fiscalía, la mayoría de estos delitos se producen en propiedades de la Iglesia. Así, la mayor parte de los objetos substraídos el pasado año, concretamente 23, fueron orfebrería religiosa y otros nueve esculturas también eclesiásticas.
De este modo, en abril del 2009 se registró un robo en la iglesia de la parroquia de Pasaxe, en el concello coruñés de Coirós, de donde los ladrones substrajeron objetos valorados en unos 22.000 euros, como una cruz de plata del siglo XVIII, un cáliz del mismo material, un copón de metal pesado, un incensario de bronce niquelado, crismeras con óleos, dos rosarios y un cepillo de madera del siglo XIX.
Asimismo, en el municipio coruñés de Boimorto se produjo un robo de este tipo en un pazo situado en la parroquia de Boido. Los ladrones se llevaron una talla de madera policromada de San Roque. En la capilla de Medeiros, en el municipio ourensano de Monterrei, las víctimas fueron una imagen de San Antonio y un retablo neoclásico.
En la Illa de Arousa, la Guardia Civil detuvo a tres personas por robar efectos valorados en 1.000 euros en la iglesia parroquial de San Esteban de Tremoedo. Por otro lado, en la iglesia de San Vicente do Mar, en O Grove, los cacos robaron tres casullas, un alba, tres estolas, una imagen del Niño Jesús de madera policromada y un copón del sagrario; todo ello valorado en unos 5.000 euros.
En la iglesia de Nigoi, en A Estrada, los objetos robados fueron una talla religiosa de pizarra de la Virgen de Santa Bárbara que se encontraba en el exterior del templo. Además, en el lugar de Agudelo de la localidad pontevedresa de Barro se sustrajo un banco de piedra del crucero de Vilar y la Guardia Civil pudo comprobar otro intento de robo en el altar del crucero de As Eiras, en el mismo municipio, al detectar daños en la estructura.
Algunos de estos delitos logran ser esclarecidos. Es el caso del robo de dos tallas de madera del siglo XVIII, sustraídas de la iglesia del Castillo de Monterrei y recuperadas en marzo del pasado año.
No sólo a la Iglesia
Pero no solo de piezas religiosas viven aquellos que atentan contra el patrimonio histórico. Por ejmplo, los vecinos de la parroquia de Sabrexo, en Vila de Cruces, denunciaron en 2009 el robo de una moa de un molino de piedra.
En esta misma línea, en mayo del pasado año se denunció el estado de abandono de cuatro cañones que se encontraban semihundidos en el suelo del muelle pesquero de Camariñas y que se estaban utilizando para el amarre de embarcaciones. Estos pertenecían al Castelo do Soberano y fueron traslados de su ubicación original por culpa de unas obras.
Los traficantes de arte religioso cuentan con un circuito estable en Galicia
La Fiscalía Superior de Galicia cree que existe un tráfico comercial ilícito consolidado de objetos religiosos en la comunidad, algo que se venía sospechando desde hace años. Así lo ha aseverado hoy el fiscal superior, Carlos Varela, en su intervención en las VI Xornadas sobre Patrimonio Cultural de Galicia, celebradas en Baiona (Pontevedra).
En este sentido, Varela citó los innumerables delitos contra el patrimonio cultural que poseen los montes vecinales en mano común, como petos de ánimas, cruceros, puentes, yacimientos arqueológicos, restos de calzadas romanas, castros, ermitas, castillos o dólmenes; así como los objetos de arte sacro custodiados en iglesias y pazos.
El responsable de la Fiscalía mostró también su preocupación por la relación entre la legislación sobre patrimonio y las leyes urbanísticas, como las del suelo o las planificaciones municipales; y por los daños que está sufriendo buena parte de la arquitectura defensiva medieval gallega, principalmente en manos privadas.
Procedimientos en 2009
Durante 2009, se registraron en Galicia 20 procedimientos penales por delito contra el patrimonio histórico, 8 en la provincia de A Coruña, otros tantos en la de Pontevedra y 4 en Lugo. 11 de ellas dieron lugar a escritos de acusación de la Fiscalía.
Estos datos suponen una ligera disminución sobre los procedimientos penales incoados en 2008, 25 en toda Galicia, 13 de ellos en la provincia de A Coruña y 12 en Pontevedra. En ese año, fueron 3 las cualificaciones fiscales y se dictaran 8 sentencias, 5 en A Coruña y tres en Pontevedra.
Por otro lado, el pasado año hubo dos sentencias ejemplarizantes en esta materia. En la primera, se condenó a tres submarinistas británicos por extraer materiales de un pecio del siglo XIX en la costa de Ribeira. La otra sentencia firme condenó al administrador de una empresa de losa a un año y tres meses de prisión y una multa de 4.200 euros por causar daños irreversibles en el recinto castrexo de Pena do Castro, en el municipio lucense de A Fonsagrada, tras hacer caso omiso de una orden de paralización de la actividad por parte de la Administración.
Robo del patrimonio eclesiástico
Según los datos manejados por la Fiscalía, la mayoría de estos delitos se producen en propiedades de la Iglesia. Así, la mayor parte de los objetos substraídos el pasado año, concretamente 23, fueron orfebrería religiosa y otros nueve esculturas también eclesiásticas.
De este modo, en abril del 2009 se registró un robo en la iglesia de la parroquia de Pasaxe, en el concello coruñés de Coirós, de donde los ladrones substrajeron objetos valorados en unos 22.000 euros, como una cruz de plata del siglo XVIII, un cáliz del mismo material, un copón de metal pesado, un incensario de bronce niquelado, crismeras con óleos, dos rosarios y un cepillo de madera del siglo XIX.
Asimismo, en el municipio coruñés de Boimorto se produjo un robo de este tipo en un pazo situado en la parroquia de Boido. Los ladrones se llevaron una talla de madera policromada de San Roque. En la capilla de Medeiros, en el municipio ourensano de Monterrei, las víctimas fueron una imagen de San Antonio y un retablo neoclásico.
En la Illa de Arousa, la Guardia Civil detuvo a tres personas por robar efectos valorados en 1.000 euros en la iglesia parroquial de San Esteban de Tremoedo. Por otro lado, en la iglesia de San Vicente do Mar, en O Grove, los cacos robaron tres casullas, un alba, tres estolas, una imagen del Niño Jesús de madera policromada y un copón del sagrario; todo ello valorado en unos 5.000 euros.
En la iglesia de Nigoi, en A Estrada, los objetos robados fueron una talla religiosa de pizarra de la Virgen de Santa Bárbara que se encontraba en el exterior del templo. Además, en el lugar de Agudelo de la localidad pontevedresa de Barro se sustrajo un banco de piedra del crucero de Vilar y la Guardia Civil pudo comprobar otro intento de robo en el altar del crucero de As Eiras, en el mismo municipio, al detectar daños en la estructura.
Algunos de estos delitos logran ser esclarecidos. Es el caso del robo de dos tallas de madera del siglo XVIII, sustraídas de la iglesia del Castillo de Monterrei y recuperadas en marzo del pasado año.
No sólo a la Iglesia
Pero no solo de piezas religiosas viven aquellos que atentan contra el patrimonio histórico. Por ejmplo, los vecinos de la parroquia de Sabrexo, en Vila de Cruces, denunciaron en 2009 el robo de una moa de un molino de piedra.
En esta misma línea, en mayo del pasado año se denunció el estado de abandono de cuatro cañones que se encontraban semihundidos en el suelo del muelle pesquero de Camariñas y que se estaban utilizando para el amarre de embarcaciones. Estos pertenecían al Castelo do Soberano y fueron traslados de su ubicación original por culpa de unas obras.