Poco podemos adelantar de lo que se va a servir en Compostela: ritmos rápidos, cortados con una botella rota, mucha camiseta negra y un estilo de baile que es hipnótico de lo sencillo y arriesgado para la integridad física que es. Aunque ya se sabe, no hay “pogos” como los de antes.
El escenario será el de la Sala Capitol de Santiago de Compostela. Las entradas cuestan 15 euros adelantadas y 20 en taquilla. Pueden adquirirse en las tiendas Gong, A Reixa, Elepé y Portobello.