La visita de Benedicto XVI atraerá a miles de personas a Compostela. Todos estos fieles, o personas con interés por ver de cerca cómo es este tipo de eventos, tienen necesidades humanas y prosaicas, como la comida. Para evitar las aglomeraciones en los establecimientos de hostelería, se instalarán en la Praza do Obradoiro máquinas expendedoras, junto a una zona de descanso que se habilitará en la plaza.
Los fieles, que podrán acceder al recinto, a partir de las 7.15 de la mañana, dispondrán de este servicio de vending para amenizar la espera; ya que la eucaristía no comenzará hasta las 16.30 horas. Los asistentes podrán dispensarse, por el momento, tanto snacks como bebidas frías y calientes.