La ribera norteña de la ría de Arousa guarda villas en las que se suceden los lugares tranquilos e interesantes. Uno de ellos es Pobra do Caramiñal, tradicional centro conservero que cuenta con playas. Los orígenes de esta villa son del siglo XIX, cuando la nobiliaria Pobra do Deán y la marinera Caramiñal se unieron. Este origen se deja ver en la morfología, en la que los edificios nobiliarios, los pazos y las estructuras de trabajo marinero se alternan, dando un aspecto realmente singular.
Uno de los lugares para visitar es el mirador de A Curota, situado a 368 metros de altitud. Desde allí es posible disfrutar de las vistas inmejorables de toda la ría de Arousa. También se conoce como mirador Valle-Inclán, vinculado a la villa y que cuenta con monumentos dedicados a su persona en todo el término municipal.