Borba celebra a partir del 6 de noviembre su feria del vino. Después de haber acabado la vendimia y de acabar con las tareas de embotellado de la cosecha de 2009, es momento de disfrutarlo. Durante nueve días, será posible disfrutar de los vinos en recorridos turísticos por las tascas de Borba. El programa de fiestas apuesta por la tradición musical para las noches, cuando casi todos los días habrá actuaciones de grupos de fado.
El programa se completa con juegos tradicionales, como el campeonato de malla, y los deportes como el rugby.
La localidad está muy cercana a Extremadura, por lo que es una oportunidad para conocer ambos lados de la frontera. La Estremadura portuguesa cuenta con los mismos espacios abiertos, los grandes contrastes de paisaje y la calidez del ambiente que su homóloga española. Aunque si el visitante se dirige hacia la costa, podrá disfrutar del paisaje soleado y cortante de los acantilados de tierra rojiza sobre el océano embravecido.
La feria del vino es una excusa perfecta para cruzar “a raia” y conocer una región feliz y abierta que destila vida y sabor.