“Suspendemos todos los despegues del A380 hasta que estemos completamente seguros de que tenemos la información suficiente sobre el QF32”, ha anunciado el presidente ejecutivo Alan Joyce, en referencia al vuelo en el que se registró ese incendio de motor. El avión había partido de Londres y hacía escala en Singapur. Poco después de partir de nuevo hacia su destino, Sydney, comenzaron los problemas con uno de los cuatro motores justo en el momento en el que se sobrevolaba la isla indonesia de Batam, lo que obligó a volver urgentemente al aeródromo singapurense, ya con el motor completamente inoperativo.
La aerolínea cuenta con seis A380, el avión de pasajeros más grande fabricado en la historia. Se trata de uno de los incidentes más graves ocurridos hasta la fecha en este modelo, que lleva en el aire con fines comerciales apenas tres años.