Según ha informado la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, el decreto, publicado el lunes y que entra en vigor este martes, afirma literalmente que “se ofrecen las mismas soluciones de dispositivos electrónicos para el pago de los peajes a los conductores de los vehículos con matrícula extranjera y portuguesa” que transiten por infraestructuras que dispongan de sistema de cobro electrónico de peajes. Esta era una de las principales reivindicaciones de la Xunta para que no se viese mermada la movilidad entre Galicia y Portugal.
Así, el documento regula la opción prepago en Portugal, a la espera de que a inicios del próximo año esté disponible también en España, bien a través de la compra del dispositivo o de su alquiler en las áreas de servicio de las autovías de peaje, estableciendo un prepago mínimo de 10 euros para los vehículos ligeros y de 20 euros para los pesados.
Asimismo, se elimina, por lo tanto, el deber de efectuar un recargo mínimo de 50 euros que establecía el anterior decreto. Además, en el caso de optar por el alquiler, se deberá abonar una fianza igual al precio del dispositivo, que se reintegrará una vez devuelto el aparato y abonado el precio del alquiler.
El decreto también estipula otras opciones distintas al prepago, como la posibilidad de pagar por adelantado en el caso de trayectos predefinidos, bien a través de internet o de modalidades de pago electrónico.
A finales del pasado mes de noviembre se hizo efectiva otra de las medidas acordadas en la reunión que el conseleliro Agustín Hernández mantuvo en noviembre en Viana del Castelo con un representante del Gobierno luso, que consiste en la posibilidad de adquirir el dispositivo Vía Verde (similar al OBE español) en las oficinas de Caixa Geral de Depósitos o bien en el Banco Simeón en Galicia.