Los vecinos de Cerceda adelantaron la llegada del Entroido –carnaval gallego– e inauguraron hoy, Día das Candeas en esta villa, las fiestas más divertidas del calendario. El motivo del adelantamiento es que este año se ampliará la temporada de fiesta con la recuperación de una figura del carnaval tradicional: Os Chascos. Desde hoy, y hasta el próximo 12 de marzo, las burlas, sátiras, sarcasmos y bromas verbales, es decir, Os Chascos, protagonizarán las relaciones de la gente del pueblo que lleva años haciendo una importante labor a cara descubierta a revivir y consolidar una de las fiestas más importantes y antiguas en la comarca.
Con esta la recuperación de Os Chascos, los cercedenses siguen recuperando el Antroido tradicional. Desde el año 2000 un grupo de vecinos inició esta búsqueda de referentes tradicionales y en las últimas ediciones logró que la mayor parte de la villa se volcase en la celebración de este evento, apoyados por la Asociación Cultural Lucerna. La asociación hace un llamamiento a toda la gente del pueblo, para que acuda a la reunión abierta convocada para este próximo domingo, 6 de febrero, en la Taberna de Cerceda, a las 18.00 horas, con el objetivo de poner en común ideas y concretar las claves de la semana grande del Antroido de este año, que concluirá el sábado 12 de marzo.
Ese día, y después de llevar recorriendo los locales de hostelería de toda la villa durante las jornadas previas, los vecinos detendrán al Achabacano, un enorme muñeco ataviado en cada edición de manera diferente según el tema central elegido para la fiesta en función del que pasó al largo de los últimos doce meses en el ayuntamiento y mediante lo cuál se impide que desaparezca en el olvido a figura más típica del Antroido tradicional de esta zona. Lo Achabacano será detenido y después quemado y enterrado, representando el fin del Antroido y la llegada del orden. Con la lectura del testamento, el Antroido le dejará nuevamente algo a cada lugar del ayuntamiento y la cada habitante a través de un mensaje siempre lleno de ironía para hacer risa y tomar con humor los asuntos más controvertidos del lugar y de sus gentes. La música, la fiesta, la bebida y la comida propia de la época, los juegos para mayores y pequeños y los disfraces de todo tipo completarán la jornada a chunga por excelencia en Cerceda, que además este año podría incluir más sorpresas y novedades de las que seguiremos informando.