En las próximas semanas, en Huesca-Pirineos sólo van a quedar los vuelos semanales a Londres organizados por Aramón. A pesar de esta situación, el director gerente de Pyrenair, Hugo Puigdefabregas, ha trasladado que no contemplan dejar de volar y que seguirán haciéndolo desde Huesca, aunque para ello se va a iniciar un periodo de reflexión para replantear sus objetivos y planificar la próxima temporada.
Los problemas de liquidez que han provocado la cancelación, ha dicho Puigdefábregas, vienen dados por la incapacidad de Pyrenair de obtener este año un crédito bancario. Algo necesario para poder pagar la factura de los vuelos antes de fletarlos, como se les exige, puesto que el dinero que ingresan de las touroperadoras se cobra con posterioridad, hasta 90 días después.
“A fecha de hoy hemos pagado todos los vuelos desde enero, pero todavía no hemos empezado a cobrar de nadie. Nosotros volamos entre quince y dieciséis semanas y eso significa que esto mismo siempre nos va a ocurrir y este año ah sido totalmente imposible superarlo, con lo cual hemos tenido que tomar esta dramática decisión”, ha manifestado.
En este sentido, Puigdefabregas ha dicho que han cometido un error de cálculo al no prever el retraso de los ingresos. Ha manifestado que “lo reconocemos, como gestores de Pyrenair hemos cometido un error de cálculo, porque creíamos que podríamos aguantar el tirón de la tesorería de la caja, aún cobrando más tarde, y no ha sido así”.
Puigdefábregas ha insistido en que la rentabilidad de las compañías pasa por dar a conocer el aeropuerto Huesca-Pirineos a través de una sociedad de promoción. Desde que se pusiera en marcha el aeropuerto, Puigdefábregas ha recordado que siempre ha existido buena relación con el Gobierno de Aragón, en especial con la Consejería de Turismo y con su titular, Arturo Aliaga.
En cuanto a los usos y funcionamiento de los vuelos, Puigdefábregas ha asegurado que no es problema de afluencia de visitantes, puesto que cada año se requieren mayor número de plazas.