Navarra celebra el Viernes Santo por todo lo alto y cuenta con tres procesiones que destacan por su importancia. Puedes escoger entre el Santo Entierro de Pamplona, la procesión barroca de Corella o la Pasión Viviente de Andosilla, donde se podrá disfrutar de un mercado de artesanías de tradición hebrea. Además la Vía Crucis viviente de Andosilla, que comienza a las 10.00 horas del 22 de abril, cuenta con los quintos del pueblo para escenificar los actos bíblicos. El momento más conmovedor es el de la crucifixión. Ésta es una propuesta para vivir la Semana Santa por la mañana en Navarra.
Por la tarde el Viernes Santo se traslada a Pamplona y Corella. Puedes elegir entre el Santo Entierro de Pamplona, que se celebra a las 19.30 horas. En él se puede contemplar los pasos de la Dolorosa Virgen clamando al cielo. Llegada la media noche, la imagen vuelve sola por las calles del casco antiguo a la iglesia de San Lorenzo.
La otra opción es acercarte a Corella, a las 20.00 horas, donde se celebrará un solemne desfile barroco. Se trata de un desfile del siglo XVIII que en 1967 fue declarado Procesión de Interés Turístico por el Ministerio de Información y Turismo por ser uno de los cincuenta desfiles procesionales más característicos y originales de España.
La escena cumbre del drama es el Encuentro de Cristo con Cirineo y la Verónica. En la plaza del Crucero Cristo camina portando una pesada cruz de cien kilos. Con el rostro sufriente camina lentamente hasta que aparece un hombre con hábito morado. Tras arrodillarse y besar el suelo en tres ocasiones, se aproxima a Cristo y le ayuda a acarrear su carga el resto de la procesión. Aparece la Verónica con un paño blanco y limpio y enjuaga la cara del Señor. En el lienzo queda impresa su imagen.