En el certamen compitieron 44 sumilleres que cataron más de 40 vinos y destilados. En la cata que decidió su paso a la final, realizada con vinos de Bodegas Azpilicueta, los participantes tuvieron que descifrar qué vino se escondía en una copa negra. Un exquisito surtido de caldos de diferentes bodegas y otras delicatessen en la apertura al público de La Nariz de Oro Experimenta, una feria vitivinícola y gastronómica que convirtió a los bilbaínos en sumilleres por un día. En esta semifinal los sumilleres afinaron su olfato para identificar una muestra de las viñas de Azpilicueta en Aldeanueva, cosecha 2009, con nueve meses de barrica en roble americano.
Además de Zubillaga, se clasificaron también: Jean Marcos Núñez, de Vinoteca Ruta del Vino en Santander; Roberto Monreal del Restaurante Baserri en Pamplona; Jon García Zabalescoa, del Bar Álex en San Sebastián; Arnau Estrader, de Anima Ardotegia en Zarautz; Matías Esteban, de El Colmado de Ezcaray (La Rioja); Oscar Santa Coloma, del Restaurante Maialen Maitia en San Sebastián; Iñaki Gartxo, del Restaurante Gartxo en Olaberría (Guipúzcoa).