El sector hostelero en Galicia espera una ocupación del 75% en verano con la que espera mejorar los datos del primer cuatrimestre. A estas alturas, el 60% de las reservas para julio y agosto ya están cerradas, pero el sector da por hecho que esta cifra aumentará hasta el 75% porque los usuarios reservan en el último momento.
El porcentaje de ocupación incluye no solo a hoteles sino también a las pensiones. Una de las principales preocupaciones del sector es la caída de los ingresos aunque se confía en que con el aumento de la demanda en las vacaciones estivales, los precios baratos puedan desaparecer y se situarlos en valores normales. Además por causa de la crisis también se gasta mucho menos por persona y los clientes suelen reservar solo el alojamiento sin desayunos ni comidas.
Las previsiones de visitantes auguran picos de hasta el 90% de ocupación en Compostela, mientras que en Lugo y Ourense se llegará “como máximo” al 65%. El sur de Galicia tiene buenas expectativas. El presidente de la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Baiona (Aceba), Ezequiel Simons, maneja datos “optimistas” de entre el 60% y el 70% para julio, tras un mes de junio al 40%. Hasta el momento, las reservas son del 25% entre semana con llenos durante de viernes a domingo, mientras que los fines de semana se encuentran al completo.
Por su parte, el director de comunicación de la Asociación de Hosteleros de Santiago, Aser Álvarez, discrepa y considera que Compostela ha sido una de las que más ha sufrido el parón turístico en lo que va de año por “la eliminación de los vuelos de bajo coste”.