Gracias a ello Galicia es la segunda región española que más activa se ha mostrado en el primer semestre para captar este tipo de negocio.
La euforia se rompe con el descenso del 26% registrado en el puerto de Vilagarcía de Arousa, con 1.451 turistas de crucero. De todos modos, las previsiones invitan al optimismo. Para este 2011, se espera nada menos que medio millón de turistas de trasatlánticos por los muelles gallegos.
Para todo el presente ejercicio, se prevé un total de 200 escalas con sus correspondientes consecuencias positivas para la economía. Según cálculos realizados por diferentes Cámaras de Comercio, cada turista llegado en barco suele dejar 60 euros por escala (regalitos, comida, consumiciones diversas). Y si contamos además a los miembros de la tripulación, cada uno de ellos se deja otros 40 euros.
Ferrol acaba de apuntarse al maná de los cruceros, pero para este año ya calcula la llegada de unos 11.000 pasajeros. Las previsiones se multiplicarán para el ejercicio 2012, puesto que ya se han contratado 12 nuevas escalas. La ciudad naval pretende seguir así los pasos de A Coruña, que en el 2010 logró un incremento del 30% en la cifra de pasajeros.
Según indican desde su Autoridad Portuaria, la inmensa mayoría de estos cruceristas se quedan en la urbe herculina. Y Vigo bate todos los records, allí cada turista de crucero llega a desembolsar 95 euros durante su escala.