Una guía que, se pondrá a la venta la próxima semana en la capital turolense, propone una alternativa que lleva al peregrino desde Sagunto hasta Burgos, donde allí toma el tradicional Camino de Santiago. Teruel es uno de los puntos de este recorrido alternativo para los peregrino y supone, desde la ciudad levantina hasta Burgos, un total de 540 kilómetros que Bona divide en 20 etapas.
Peregrinos levantinos y de Italia utilizaron a partir del siglo XIII esta ruta que, partiendo del Puerto de Sagunto (Valencia) y atravesando las provincias de Castellón, Teruel, Zaragoza, Soria y Burgos, enlazaba en esta última con el camino xacobeo francés para llegar a Santiago de Compostela.
El autor de la guía, Luis Miguel Bona, ha explicado que la obra ha sido fruto de su conocimiento y experiencia sobre el Camino de Santiago y de más de 18 meses de trabajo. “Investigando sobre el recorrido, descubrí una obra que hacía referencia a los caminos de Santiago por Aragón, y concretamente, citaba uno desde Sagunto, por Teruel, Daroca y continuar por Calatayud hasta el camino Jacobeo del Ebro hasta Logroño, pero también había peregrinos que elegían realizar el recorrido por Cervera de la Cañada hasta Burgos”, ha apuntado Bona.
La ruta que se propone Luis Miguel Bona en la guía pretende recuperar un viejo camino que utilizaban, tras la Reconquista, aquellos peregrinos que llegaban a España a través del puerto de Sagunto. “Según el libro de Carmen Sanchís, “Carretera de Aragón, de Sagunto a Teruel”, del recorrido y los trazados de los que hablamos coincidiría con pistas medievales, caminos reales y la actual nacional 234 que, es el eje vertebrador de toda la ruta”, según ha indicado Bona.
El recorrido, “coincidiría con pistas medievales, caminos reales y la actual Nacional 234 que, es el eje de toda la ruta”, ha indicado Bona, aunque ha señalado que “se han intentado evitar los tramos asfaltados”. Además, coincide en parte con los recorridos de la Ruta del Cid, del Camino de la Veracruz o la Vía Verde de Ojos Negros, entre otros caminos relevantes.
Bona comenzó a recopilar la información sobre este camino en 1993, aunque el trabajo más intenso lo ha realizado desde que se prejubiló a lo largo de 18 meses. Para facilitar el seguimiento de la ruta “hemos marcado las entradas a los pueblos para que el peregrino pueda conocer la cultura de los pueblos, también para ponerlos en valor”, aunque “también se puede hacer en línea recta”.