Con esta iniciativa, Renfe refuerza su estrategia de avanzar en la innovación y el uso de las nuevas tecnologías para facilitar el viaje en tren y atraer viajeros a su medio de transporte. Los pasajeros que adquieran sus billetes de tren por Internet y que sean titulares de un ‘smartphone‘, en vez de imprimirlo podrán optar por recibir en su dispositivo un código de barras o BIDI. El viajero podrá acceder al tren y validar su plaza tan sólo con este código.
Se trata de un sistema que se encuentra actualmente en pruebas aunque desde la compañía ferroviaria española confían en tenerlo habilitado para su uso comercial este verano como muy tarde.
Renfe vende actualmente a través de Internet un tercio del total de sus billetes de tren. Otra tercera parte se comercializa en las taquillas de las estaciones y el otro, a través de agencias de viajes.
En fechas recientes, la compañía decidió retirar el gravamen del 2,75 por ciento que aplicaba a la compra online para potenciar este tipo de adquisiciones vía Internet. Un sistema que, está visto, quiere ahora reforzar de forma definitiva.
Asimismo, y con el mismo fin de potenciar la demanda de viajeros de tren, Renfe reestructurar los servicios para facilitar las conexiones y trasbordo de trenes, y poder así vender los anunciados ‘billetes integrados’, que permiten enlazar viajes en dos trenes distintos.