Las obras del futuro Albergue de Peregrinos del barrio incorporado de Zamarramala ya están en marcha. Le empresa adjudicataria, Hiregón, reconvertirá la antigua Casa del Maestro en lugar de parada y fonda con una capacidad máxima para 40 personas que deberán acreditar su condición de peregrinos, provenientes del Camino de Madrid hacia Santiago de Compostela en su cuarta etapa, Cercedilla-Zamarramala.
La parcela sobre la que se construye el nuevo centro de acogida posee una superficie de 170 metros cuadrados y se encuentra situada en la calle Real Baja del núcleo zamarriego. Con una capacidad máxima para 40 personas, que deberán acreditar su condición de peregrinos. La construcción del edificio responde a la actual inexistencia de un lugar acondicionado para el descanso de los peregrinos, que por el momento pueden descansar en la ermita de San Roque.
El albergue complementará la oferta turística de la ciudad ya que los peregrinos que lo deseen podrán organizar sus rutas y visitas a la ciudad, una vez hayan acabado la etapa correspondiente.
Por el momento se está estudiando el establecimiento de un canon mínimo y “simbólico” o incluso la gratuidad de la pernoctación. La fórmula de gestión del mismo se decidirá tras su construcción y contando con la opinión la Asociación de Vecinos del barrio incorporado.
El edificio se distribuirá en dos plantas, en la baja se situará la cocina-comedor, una zona de taquillas, los baños y una sala dormitorio con literas dobles y en la planta superior se ubicarán los baños y la sala dormitorio, además de una sala de estar. Además, también contará con un patio de más de 50 metros cuadrados a través del que se accederá al edificio y que servirá “para compartir experiencias agradables”.
Desde el lugar, se inicia la quinta etapa del Camino de Madrid hacia Santiago de Compostela, Zamarramaña-Santa María la Real de Nieva, que posteriormente enlaza con el Camino Francés en Sahagún (León), junto al santuario de la Virgen Peregrina.
Está previsto que el coste total del proyecto supere los 230.000 euros y que los trabajos finalicen el próximo verano. A partir de ese momento, la ciudad incorporará un nuevo recurso turístico y contribuirá al conocimiento del patrimonio cultural e histórico de Segovia al situarse en un enclave estratégico desde el punto de vista ambiental desde donde se contemplan unas magníficas vistas de la capital.