La Galería Trinta de Arte Contemporánea de Santiago de Compostela, abre esta tarde una nueva exposición con un acto de inauguración a las 20.00 horas. La muestra de Berta Cáccamo, que se mantendrá hasta el 14 de enero se titula “Setenta e tres pinceladas”:
“Recuerdo que mi mayor dificultad fue considerarme artista. En los primeros años de estudiante de Bellas Artes en Barcelona me producía vértigo pensar en llegar a ser pintora y aún más en ser artista, término que designaba a los autores que yo iba descubriendo con fascinación…Después fui encontrando el modo de que lo que yo hacía se fuese pareciendo al arte, o por lo menos al arte que debía imitar si quería ser pintora. Hoy pienso que el arte es imitación…Recurrimos a la imitación del mismo modo que emulamos a las personas que nos anteceden, los modelos humanos que copiamos…Yo he vivido el hecho de nacer en una familia en la que hay un importante vínculo con la cultura; pintaba desde pequeña, tuvimos unos excelentes talleres de plástica desde el período infantil en el colegio alemán y contaba con el apoyo de algún hermano que me ponía a “trabajar” al volver de clase y guardaba y valoraba mis dibujos…”
“El arte tiene la capacidad de asombrarnos. La experiencia del asombro detiene la actividad de la mente, el torbellino mental. Es la sorpresa del ahora. Es el asombro lo que detiene la estructura dialéctica de la mente. Reconocer el pensamiento es el puente de entrada a la actividad artística. En la práctica del arte la sensación se da en presente. El pasado y el futuro se vuelven huidizos…El tiempo desaparece, el tiempo no deja de ser un pensamiento…El arte tiene el poder de acercarnos a la realidad, de situarnos en el tiempo presente. El arte tiene el poder de despertarnos de un sueño.”
“Cuando decido hacer un cuadro, pienso previamente cómo lo voy a realizar, establezco unos parámetros que a menudo vienen dados por las propias características de los materiales y por la idea que sustenta la propuesta, pero siempre suele surgir de una necesidad, una necesidad de avance.”
“Después de 25 años en la pintura llegas a pensar que ya has formulado tu proyecto, que todo está ya hecho, pues aquellas pequeñas aportaciones o variaciones en torno al extenso espacio de la pintura abstracta fueron ya formuladas y sólo queda no copiarse más. Pero aparece la necesidad de experimentar en un territorio diferente y descubres de nuevo las infinitas variables de una nueva idea.”