La cita gastronómica se celebrará el próximo fin de semana, los días 3, 4 y 5 de mayo
La fiesta se celebra desde 1961, y da una idea de cómo es la relación de Arbo con este animal prehistórico. En la localidad teense, la lamprea es la especialidad de bares y restaurantes. Aunque la lamprea se captura en todo el tramo final del Miño, desde A Guarda hasta el embalse de A Frieira, es en Arbo donde tiene más fama, ya que la localidad está situada junto a un tramo de río en el que la corriente es más fuerte, por lo que su carne es más compacta y dura. Incluso la forma de pescarlas es especial: se capturan con pesqueiras, trampas hechas con piedras sin sujeción externa alguna de origen muy antiguo. Se trata de pequeños muros colocados en posición oblicua con respecto a la corriente. Tienen un pequeño agujero que deja entrar, pero no salir.
La propiedad de estos aparejos es de carácter comunal. Algunas de las familias que disponen de pesqueiras tienen el derecho de pescar lampreas desde la Edad Media, aunque en la actualidad, el mal estado de las aguas de los ríos está afectado a su supervivencia. Sólo se pueden capturar durante tres meses al año.
Así que una de las citas ineludibles de este mes de mayo que entra nos lleva hasta Arbo. Una localidad por descubrir que hace de su patrimonio natural y gastronómico su mejor carta de presentación: no se pierdan los parajes naturales próximos, como la aldea de Barcela o la cima del monte de San Fins, y visitar los Pazos de Almuíña, Pombeiro y Sande.
En esta tradicional fiesta se puede degustar la lamprea preparada de varias formas culinarias: en empanada, seca, rellena o en su propia salsa y para mayor deleite se puede acompañar de los excelentes vinos de Arbo.