Además el ambiente festivo se extenderá a todo el casco urbano y no se ceñirá sólo a la plaza de San Sebastián como hasta ahora. Además, lo más importante es que la preparación será casera y muy personalizada y no de manera industrial.
Cada local cocinará su propia especialidad con el objetivo de poner en valor los callos autóctonos de Porriño.
La ración de callos, pan y la cazuela conmemorativa tendrán un precio de 4 euros. Los establecimientos participantes dispondrán de un distintivo para que los clientes puedan identificarlos.