Un escenario suele ser el lugar propicio para las confesiones. Y Barzin lleva más de diez años regalándoselas, en forma de pequeñas gemas de folk-pop melancólico, a aquellos que asisten a sus conciertos. A lo largo de este tiempo el cantautor canadiense ha sabido forjar un estilo extrañamente personal, esbozando a base de pequeñas y honestas historias un imaginario basado en los efectos demoledores de las relaciones fallidas, la culpa y el remordimiento.
Desde su primer álbum homónimo, su sonido ha sufrido una tranquila y constante transformación. Desde el minimalismo deudor del slowcore canónico de Red House Painters, los momentos más tranquilos de Slint o la primera Cat Power propio de sus dos primeros discos las canciones del canadiense han ganado en variedad ypunch pop gracias a los arreglos de cuerda de Karen Graves y al renovado protagonismo de su voz.
Fruto de este cambio y del duro trabajo de los últimos cuatro años surge “To Live Alone In That Long Summer” (Monotreme Records, 2014), disco que veía la luz el pasado mes de Febrero y que Barzin presentará en formato quinteto el 27 de abril en la Casa Das Crechas, en esta nueva edición del Placeres Ocultos. “All The While”, primer adelanto del disco, apunta maneras. Prohibido perdérselo.