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Paso de Pontillón, Oseira
Las vías que se abrieron desde el siglo IX por toda Europa continental e insular hacia Santiago acabaron siendo caminos históricos. La necesidad de articular vías de conocimiento y comercio entre los diferentes pueblos que nacieron desde la caída del imperio Romano de Occidente impulsaron el camino Francés, el Inglés o el Portugués, por ejemplo. En cambio, otros caminos hacia el norte peninsular que se habían olvidade, fueron rescatados gracias al fenómenos jacobeo. Así, la Vía de la Plata, uno de los trayectos más importantes de la Hispania romana, se recuperó como vía de comunicación comercial y religiosa entre las comunidades hispanas.
El Bono Iacobus os lleva a conocer las etapas gallegas de la Vía de la Plata. Un recorrido por lugares históricos de Ourense, Pontevedra y A Coruña que florecieron gracias al comercio impulsado hacia el sur.
La Vía de la Plata romana unía la Mérida romana (Emérita Augusta) con Astorga (Asturica Augusta), en la provincia de León. Existen varios ramales por los que dirigirse hacia el oeste en dirección a Santiago de Compostela. El Bono Iacobus nos lleva desde Verín hacia la meta del Camino durante un trayecto que se completa en ocho días. La delicada belleza de la Galicia interior, la perfecta integración del patrimonio histórico y artístico con unos paisajes autóctonos
Escogemos algunos de los lugares más significativos por el que discurre el camino argento.
Verín
Una de las villas más importantes d ella Galicia interior. Es famosa, entre otras cosas, por ser unpo de los vertices del triángulo do Entroido, junto con Laza y Xinzo de Limia. El patrimonio inmueble de Verín es rico y variado; podemos contemplar un conjunto fortificado y una buena cantidad de pazos urbanos levantados durante la Baja Edad Media. El pasado romano de Verín se deja sentir en la costumbre termalista de la villa, donde permanece hoy día Cabreiroá, a pocos kilómetros del centro urbano. Durante nuestro paso por Verín no podemos dejar de admirar A Torre das Damas o el pazo urbano A Casa do Asistente, actualmente alojamiento de peregrinos. También destaca el Castillo de Monterrei, enclave estratégico durante la Edad Media, que no es sólo un castillo sino una fortaleza de triple muralla que rodea varios edificios.
Xinzo de Limia
La siguiente etapa nos lleva hasta el siguiente vértice del Entroido mágico ourensano. Xinzo de Limia celebra todos los veranos la Festa do Esquecemento, en la que se conmemora la entrada de las legiones romanas. El acto central de la fiesta consiste en representar cómo las legiones Décimo Junio Bruto cruzaron el río Limia. El mito nos cuenta que los romanos identificaron el río Limia con el Leto, cauce mítico que borraba la memoria de quien lo cruzaba. Décimo Junio tuvo que vadear el río en primer lugar. Una vez alcanzó la otra orilla, Junio llamó por su nombre a cada uno de sus hombres para que comprobasen que la memoria de su líder permanecía intacta.
Es una fiesta en la que participan todos los limiaos y que, por otra parte, nos permite ver de primera mano la fértil belleza de la llanura. La Lagoa de Antela, desecada a mediados del siglo pasado para dedicar el terreno al cultivo de las famosas patatas de Xinzo, recuperó el agua y parte de su hábitat natural. Hoy en día, es parte de una ZEPA, o zona de especial protección de aves. Nuestro trayecto discurre por una de las zonas naturales en recuperación del interior de Galicia. Un camino a la sombra de especies autóctonas y a la vista de aves singulares.
Allariz
Una joya pétrea y un ejemplo de recuperación y rehabilitación patrimonial. Un lugar que quizás no sea tan popular en las guías de viaje que escudriñan el interior de Galicia pero que se lleva el corazón de todos los que lo visitan. Como las villas de Ourense, Allariz florece en la ribera fluvial.
El Arnoia, río de nombre con sabor antiguo y misterioso, nos sirve de guía para descubrir un portentoso y bien conservado casco histórico. Hay que visitar, casi por obligación, Santa Mariña de Augas santas, conjunto histórico que resume las cualidades alaricanas: piedra trabajada como seda, integración reverenciosa con el entorno fluvial y presencia casi totémica de árboles autóctonos. Santa Mariña de Augas Santas. La tradición nace vinculada al martirio de Mariña. La chica esquivó el acoso de Olibrio, prefecto la ciudad de Armea. El concupiscente utilizó todo tipo de estrategias para vencer la resistencia de Mariña: juicio, prisión, castigo físico y, finalmente, martirio. La santa fue condenada a morir abrasada en un horno próximo. Mariña se libró de este tormento gracias a la intervención de San Pedro que la rescató y escondió al lado de un estanque.
Finalmente, el prefecto ordenó que le cortasen la cabeza, que fue tajada de un golpe, pero botó tres veces, manando una fuente en cada bote.
En el lugar en el que fue enterrada surgió un templo, en el que nadie más fue enterrado.
Esta leyenda resume bien el culto tradicional que mantuvo la población autóctona a las aguas, que se mantuvo y adaptó durante la cristianización. El proceso de evangelización estuvo muy ligado a la romanización. La zona de Ourense, más desarrollada y latinizada que el resto de Galicia, conserva este tipo de leyendas y patrimonio antiquísimo.
Ourense
La capital de la provincia también se levanta sobre las aguas y descansa a ambos lados del río Miño, padre fluvial de Galicia. Ourense ya no es aquella Auria que describió Blanco Amor en la que probablemente sea la mejor novela escrita en gallego. Una visita a la Cidade das Burgas no puede sino comenzar con una parada en esta prodigiosa fuente de la que emana agua caliente.
Los ourensanos han acudido a estas fuentes como remedio para numerosos males durante siglos, tradición que se mantiene hoy en día. Junto a la fuente de agua calda, encontramos unas excelentes termas públicas en las que podemos sumergirnos y recuperar el tono físico después de las primeras etapas del camino por la Vía de la Plata.
Tras el baño reparador, nos dirigiremos a la Catedral de Ourense. La basílica es uno de los grandes ejemplos de románico y góticos hecho en Galicia. La abundancia de estos estilos nos remite al mismo Camino de Santiago y a la riqueza y cultura que se transmitieron a lo largo de todas las localidades por las que atravesaba la senda jacobea.
San Cristovo de Cea
Si hay algo que le ha dado fama en las mesas de España es su pan. El famoso Pan de Cea ha conquistado los paladares de los amantes del alimento primario por excelencia y nuestro camino bien merece un alto para probar una hogaza de este sencillo manjar. Pero que sea una localidad de pequeño tamaño no quiere decir que no contenga joyas de incalculable valor artístico. El monasterio de Santa María de Oseira. Este imponente monasterio se abrió en el siglo XII y estaba habitado por monjes franceses enviadas por san Bernardo de Claraval, fundador de la Órden del Císter, la orden religiosa más importante de la Europa agraria medieval. Se encuentra en un buen estado de conservación , en el que podemos admirar algunos ejemplos de arquitectura románica ojival que anticipa el gótico por venir.
Dozón
Dejamos atrás la provincia de Ourense y nos adentramos en el país do Deza, en la provincia de Pontevedra. La capital comarcal, Lalín, es famosa por su devoción al cocido gallego. Nuestra parada está en Dozón, un pequeño municipio casi en el corazón de Galicia. Allí podemos admirar la iglesia de San Pedro de Dozón, un excelente ejemplo de arquitectura románica en buen estado de conservación.
Pico Sacro
Si el camino Francés tiene el Monte do Gozo como promontorio sobre el que divisar la meta compostelana, los peregrinos que emprenden los caminos meridionales pueden dejarse llevar por la mística del Pico Sacro. Este monte es un vértice geodésico, un punto de localización geográfico, además de un escenario de la mitología gallega y jacobea. Según la leyenda, la reina Lupa gobernaba estas tierras en los tiempos del la llegada de los restos del Apóstol.
Se cuenta que la reina pagana quiso burlarse de los discípulos del Apóstol y les indicó que podían sepultar a Santiago en el Pico, sin contarles los peligros que en él se escondían, como dragones o una de las puertas del Infierno. El que saliesen ilesos fue uno de los motivos por los que la reina se convenció del poder de los discípulos de Jesús y se convirtió.
Leyendas aparte, se trata de un lugar privilegiado desde el que observar Compostela y su comarca, antes de entrar en la ciudad y vivir la experiencia de haber completado el Camino.
Información
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