El Castro de Viladonga, ubicado en el municipio lucense de Castro de Rei, fue incorporado ayer al Registro General de Bienes de Interés Cultural, según publica hoy el Boletín Oficial del Estado (BOE), aunque la declaración de BIC estaba en vigor desde el 28 de diciembre del pasado año, fecha de su publicación en el Diario Oficial de Galicia (DOG).
La delimitación del castro como monumento comprende un área de 96.270 metros cuadrados, que incluye el recinto castreño y todas las estructuras que lo perfilan, como parapetos, murallas y vallados de piedra, construídos entre la Edad de Hierro y el período galaico-romano. Con respecto a su entorno de protección, abarca una superficie de 993.494 metros cuadrados.
El Consello da Xunta de Galicia aprobó la declaración del Castro de Viladonga como Ben de Interese Cultural en noviembre de 2009, con la categoría de “monumento”, después de recibir los informes favorables de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), la Real Academia Gallega de Bellas Artes de Nuestra Señora del Rosario y el Consello da Cultura Galega.
En declaraciones a agencias,el director del museo, Felipe Arias, explicó que esta declaración, y especialmente la inclusión en la categoría de “monumento”, supone a efectos prácticos un “mayor grado de protección” y un reconocimiento de “la importancia” que tiene este hallazgo arqueológico y los posteriores estudios científicos realizados en la zona.