La aerolínea de bajo coste irlandesa Ryanair ha amenazado mediante una carta a Miguel Sebastián, ministro de Industria, Turismo y Comercio, con cerrar de forma generalizada rutas y recortar tráfico y puestos de trabajo, si no se le retiran 65 multas impuestas que ascienden a más de 1,2 millones de euros.
La carta fue enviada el pasado 24 de enero al Ministerio de Turismo, en lugar de remitirla al responsable del transporte aéreo en España y ministro de Fomento José Blanco. En la carta le recuerda que su aerolínea operará este año más de 500 rutas en España, en 23 aeropuertos, generando más de 33.000 puestos de trabajo.
Las infracciones cometidas en aeropuertos españoles en los últimos dos años se deben a las denuncias recibidas por su política de precios y descuentos de los billetes, la falta de respuesta a las quejas de los pasajeros, las tarifas por facturación de equipaje, sus campañas publicitarias, los precios de los productos que vende en la revista de la compañía a bordo del avión, la desviación de la trayectoria en algunos de sus aviones y problemas de ruido, entre otras infracciones cometidas.
La retórica chantajista parece haberse convertido en algo habitual para la aerolínea irlandesa de bajo coste. Autoridades y clientes estaban acostumbrados a esta actitud por parte del presidente de Ryanair, Michael O´Leary, y a las agresivas campañas de publicidad de la compañía, pero el recrudecimiento de la crisis, la menor generosidad de los gobiernos regionales en sus subvenciones a la aerolínea y el endurecimiento de las sanciones por sus prácticas poco ortodoxas han llevado a la compañía a elevar aún más el tono de sus afirmaciones.
Muchos gobiernos autonómicos se dejaron engatusar por la promesa de la irlandesa de atraer a miles de pasajeros y revitalizar unas infraestructuras infrautilizadas en algunas capitales de provincia a cambio de generosas subvenciones (se calcula que 80 millones en total). El pasado año envió tres cartas al Gobierno gallego alertando de la cancelación de rutas si retiraba su apoyo institucional y el chantaje dio resultado porque la aerolínea anunció nuevas rutas que unirán Santiago de Compostela con Milán, Londres y Fráncfort.