“Foodpairing” analiza las posibles y mejores combinaciones entre diferentes alimentos y bebidas que comparten los mismos perfiles de sabor básico a nivel molecular a través de los “árboles foodpairing”.
Estos árboles son muy sencillos y fáciles de entender. Las diferentes ramas de alimentos –actualmente recoge ya más de 1.300 ingredientes– se van uniendo unas con otras, de modo que suponen una excelente herramienta para la inspiración.
De esto modo Foodpairing se ha convertido en una referencia mundial para chefs, pero también para aficionados con inquietudes creativas, a la hora de analizar y orientar los mejores resultados en maridajes gastronómicos, de experimentar nuevas y originales combinaciones, justificadas desde una perspectiva científica.
¿Qué es food pairing? Para poder definirlo correctamente debemos empezar por el principio. El food pairing es una idea que nace de un bioingeniero belga, Bernand Lahousee en 2007 y a grandes rasgos consiste en establecer una lista de los aromas de un alimento y buscar los mismos aromas en otros alimentos y así establecer uniones para desarrollar recetas. De esta forma, en primer lugar, se desglosan las propiedades organolépticas de un alimento para establecer una lista de las moléculas aromáticas que lo componen; y en segundo lugar, en buscar otros alimentos que comparten con el primero una parte de esas moléculas.
En 2009, Bernard Lahousse organizó un encuentro, el Lahousse Foodpairing, que logró reunir en Bélgica -la sede de su compañía- a la mayoría de los mejores y más representativos cocineros del mundo, entre ellos Heston Blumenthal, Peter Goossens, Sergio Herman y Albert Adrià, quienes comentaron y analizaron en profundidad los diferentes usos y posibilidades que Foodpairing puede aportar en la creación de sus propuestas culinarias.