La consellería de Medio Rural remitió a la Fiscalía la denuncia presentada por el Consello Regulador do Ribeiro contra ‘Bodegas Barbantiño S.L‘, tras acusar a la empresa de un presunta “falsificación” de contraetiquetas de la denominación de origen. Tras recibir la denuncia, el pasado 2 de enero, el Gobierno gallego inmovilizó y retiró del mercado el vino de la badega ourensana, con el objetivo de “evitar su comercialización”.
Y es que, después de abrir un expediente sancionador a la empresa por cometer presuntamente una “infracción muy grave” contra la Lei 24/2003 da viña e do viño, los inspectores de Medio Rural apreciaron “indicios de la comisión de un posible delito”. Así las cosas, la Xunta puso el asunto en manos de la Fiscalía.
Para el departamento autonómico lo “más importante” de este caso es haber “demostrado” que los controles establecidos por el Consello Regulador y por el Ejecutivo para evitar este tipo de fraudes “funcionaron correctamente”.