El Museo de la catedral de Santiago de Compostela reabrió oficialmente el pasado viernes sus puertas, tras permanecer cerrado varios meses. El edificio fue sometido a una profunda rehabilitación en las dos primeras plantas.
Las reformas, con una inversión cercana a los 400.000 euros, fueron supervisadas por el Consorcio de Santiago dentro del programa del 800 aniversario de la catedral de Santiago de Compostela.
La remodelación de las salas también ha incluido la preparación de nuevas instalaciones eléctricas, nuevo pavimento en la planta baja respetando la estructura arquitectónica, además del ordenamiento de las piezas expuestas. También se dotó el museo de un nuevo sistema de climatización y deshumidificación, además de una red de iluminación adecuada que no emita demasiado calor y que no dañe las obras policromadas.
En cuanto a seguridad, el museo ya contaba con sistemas de alarmas en los accesos, puertas y ventanas; aunque se incrementa el número de cámaras y hay una sala de pantallas para supervisar en tiempo real.
El deán de la catedral, José María Díaz, indicó que el 800 aniversario de la consagración del templo, “no marca un final, sino el comienzo de un diálogo” que, en su opinión, está “felizmente plasmado en tantas realizaciones de tipo artístico y cultural”, dijo Díaz.
Por su parte, el alcalde de Compostela, Gerardo Conde, señaló que “es un día muy importante para toda la ciudad, porque podemos ver tesoros que estaban semiocultos en esta catedral y que ahora están puestos a la luz pública en todo su fulgor”.